El miedo no es ni bueno ni malo. Porque todo depende de si te beneficia o no en el desarrollo de tus proyectos. Por un lado el miedo es un instinto que sirve para mantenernos con vida y es normal que las situaciones riesgosas nos enciendan cierto temor, desde este punto de vista el miedo es benéfico; sin embargo cuando nuestro miedo es excesivo y no nos permite realizar tareas o hacemos cosas dañinas que no haríamos en nuestro sano juicio este temor natural se convierte en un espíritu negativo conocido como “demonio”, que tiene como objetivo destruir.
Es importante saber que el miedo no se muestra tal cual es y suele esconderse bajo la máscara del enojo, la apatía o la angustia. Debemos aprender a reconocer su presencia bajo estas actitudes pues afecta gravemente a nuestra salud, nuestro trabajo y nuestras relaciones amorosas.
1)Como enojo, generalmente el miedo aparece en las personas que fácilmente caen en una situación de ira o extralimitan sus modos cuando se molestan; es decir, gritan mucho, rompen cosas, etc. Este tipo de personas es muy probable que de pequeños hayan recibido alguna forma de abuso y en la edad adulta ese temor por ser agredidos se manifiesta en forma de ira. Se trata de un miedo a ser lastimados. Si tú te enojas con facilidad te recomiendo analices de donde viene tu emoción. Si te encuentras bajo el mando del miedo, toma la rienda y subsánalo.
2)También el miedo se manifiesta como apatía, desidia o flojera. No siempre que alguien evita cualquier esfuerzo se trata de alguien flojo. Es muy probable que esta persona tenga miedo a fracasar y prefiera no comprometerse con cualquier actividad para asegurar que ésta no se complete.
3) Por último, la angustia o la inseguridad, es el miedo a perder algo que consideramos como nuestro. Si este miedo crece puede volverse un brote psicótico. Podemos comenzar a ver cosas donde no las hay y volvernos locos. Por eso es importante tener cuidado hasta donde estamos siendo controlados por este tipo de temor.
Para enfrentar estos obstáculos te recomiendo seguir cuatro tips:
1) Reconoce tus miedos
2) Utiliza tu poder de bruj@
3) Piensa en lo peor que te pueda pasar si lo que te da miedo sucede
4) Haz lo que dicta tu corazón